jueves, 23 de marzo de 2023

Tierra Santa y Children of the Beast se unen en La Paz

La canción del pirata, Mi nombre será leyenda y Mejor morir de pie son algunos de los temas que se escucharán el viernes en el Teatro 16 de Julio cuando la legendaria banda Tierra Santa se suba al escenario. El grupo de metal español se presentará como parte de la gira Destino.

“Tierra Santa regresa al país después de una pausa de tres años. Y lo está haciendo a lo grande, con sus nuevas composiciones del disco Destino, lanzado el año pasado. Además, se tendrán sus himnos, como Canción del pirata”, adelantó Álvaro Corrales, de la empresa La Biblia del Metal Producciones.

Tierra Santa es considerada como una de las principales agrupaciones de power metal en español, se formó en La Rioja en 1997. Su música combina elementos de la música clásica con el sonido del heavy metal tradicional. Sus letras a menudo se basan en temas históricos y mitológicos, cantando acerca de la epopeya del Mio Cid, la Guerra de Troya y las aventuras de los corsarios y cruzados. Entre sus discos más populares se encuentran Legendario (1999), Sangre de Reyes (2003) y Indomable (2017).

Pero el grupo no estará solo. Quienes abrirán el evento son los integrantes de la banda brasileña Children of the Beast, la principal agrupación tributo de Iron Maiden. Los músicos llegarán con su escenografía completa, dispuestos a ofrecer un espectáculo de primer nivel.

“Children Of The Beats fueron reconocidos por los mismos integrantes de Iron Maiden como el grupo latinoamericano que más se acerca a su obra. Ellos reproducen el sonido y la misma presencia de los músicos británicos en el escenario”, aseguró Corrales.

Children Of The Beast se formó en Brasil en 1993. Han tocado en festivales de música y conciertos en Brasil, Argentina, Chile, Colombia y Perú, entre otros países de América Latina. Su repertorio abarca los mayores éxitos de Iron Maiden. “Children Of The Beast promete hacer que el público boliviano se sienta como si estuviera viendo a la banda original en vivo”, agregó.

Además de las bandas internacionales, el festival de viernes contará con talento boliviano. Los elegidos son los músicos de Bajo Tierra, una banda boliviana de heavy metal que presentará sus más recientes temas, parte del disco Súplica por mi Alma. Bajo Tierra ha sido parte de la escena del metal en Bolivia desde hace varios años y ha tocado en numerosos conciertos y festivales.

La presentación se realizará el viernes a partir de las 18:00 en el Teatro 16 de Julio de la ciudad de La Paz. Las entradas se venden en el mismo escenario y en los locales Black Diamond (Sagárnaga #189 Edificio Michel) y Rockmanía (avenida 6 de Agosto, 2006).


FUENTE: Página 7

BAJO TIERRA PRESENTARÁ “SUPLICA POR MI ALMA” EL 24 DE MARZO EN LA PAZ

La banda heavy metal boliviano “Bajo Tierra” presentará su nuevo LP titulado “Suplica por mi Alma” el 24 de marzo en el Teatro 16 de Julio como parte del evento que organiza la productora de eventos “La Biblia del Metal” en la que también se presentarán los brasileros “Children of the Beast” y los españoles “Tierra Santa” quienes protagonizarán única función en el país.

“Bajo Tierra” editó su trabajo en formato vinilo con lo que el rock boliviano vuelve al formato preferido de los melómanos, el mismo ya fue presentado en Oruro, Santa Cruz y Cochabamba y recibió excelente crítica por programas especializados como “La Comunidad del Vinilo”, “El Fin del Silencio” o “Resistencia Rock Nacional”. A ello se suma la recepción de su público boliviano, brasilero y argentino, donde circula con mayor fuerza su música fuera del país.

La presentación de “Suplica por mi Alma” será antesala para la actuación de la banda española “Tierra Santa” que acaba de comenzar su gira latinoamericana en la que presentan su nuevo álbum titulado “Destino”. Los españoles ya pisaron suelo boliviano en 2018, quienes los vieron en vivo pueden dar fe de su alto nivel musical que ahora vuelven con nueva música para compartir con la escena metalera nacional.

Por otra parte, “Children of the Beast” es reconocido como el mejor tributo a la banda inglesa de heavy metal “Iron Maiden”, su espectáculo incluye lo mejor del repertorio de la Doncella de Hierro y la infaltable aparición de Eddie, la multifacética mascota que engalana las portadas de toda la discografía de la más grande representación de la New Wave of British Heavy Metal.

“Bajo Tierra” tendrá su nuevo material en vinilo disponible para los asistentes. El disco fue producido por Turu Producciones y la gestión de su música en diversas plataformas virtuales está a cargo de Gorilla Gas Records & Management por lo que se puede acceder a toda su discografía en los espacios más populares para el consumo de música en línea como Youtube o Spotify.

miércoles, 1 de marzo de 2023

EL LADO OSCURO DE LA LUNA

Hace algunos años en el documental realizado por la productora Eagle Vision “Classic Album The Dark Side Of The Moon”, el guitarrista de Pink Floyd, David Gilmour, en retrospectiva reflexionaba “quisiera haber tenido el placer de haber escuchado por primera vez The Dark Side of The Moon” (TDSOTM) expresión que explica cuál fue el impacto y asombro en millones de mortales sobre la tierra al balancear la aguja en el surco y dieron pie a los primeros segundos de esta obra fundamental de la década del 70. El tótem fue editado el 23 de marzo de 1973 en Inglaterra por el sello “bizarro” Harvest de EMI (código SHVL 804, 1E 064 o 05249), vale decir, hace más de 40 años.

La obra realizada por una coincidencia creativa de “los elementos” que conformaron esa entidad química llamada Pink Floyd: Nicolás Mason (1945), Richard Wright (1945-2008), David Gilmour (1946) y Roger Waters (1944) sumados a estos los no menos talentosos Chris Thomas como productor y un brillante Alan Parsons como ingeniero de sonido (quien llego en el brazo con el currículo de haber apoyado en obras determinantes de Los Beatles), concibieron el innegable referente, en los míticos estudios EMI en Abbey Road (Londres-Inglaterra) durante 1972.
En el proceso de construcción del disco, la suite a manera de testeo, fue tocada en varios conciertos durante 1972 y donde ON THE RUN figura por su diferencia, consistente en una larga improvisación y que para consuelo de fans las grabaciones existen en varias ediciones disponibles tanto en formato físico y digital, legal e ilegal, estas ultimas desparramadas en la autopista informática.
Si bien, el LP (Long Play) al poco tiempo de salir a la luz solo llego al puesto Nro. 2 de las listas inglesas, este continuo su andar de manera ascendente, permaneciendo durante 15 años, es decir, 725 semanas continuas entre las 200 discos más vendidos en los charts norteamericanos, convirtiéndose en el icono rock de mayor permanencia en la historia de la música. En la promoción del disco y posterior a la misma, su interpretación era obligatoria llegando a reproducir la obra por lo menos 385 veces en vivo hasta 1975, dejándolo de hacerla hasta 20 años después por las tres cuartas partes de la banda, en la gira de presentación del disco Division Bell (1994-95) y por Waters en calidad de solista durante el año 2007.
Pink Floyd parece habernos dejado un legado, que ha entrado en una dinámica de revalorización continua, como demuestra las continuas re ediciones, incluido también en una serie de sufribles, económicamente hablando, y otros no tanto box sets, con nuevas mezclas, versiones alternativas que alimentan, ese consumismo criticado en el álbum y la contradictoria ávida demanda por el disco. Como evidencia lo anterior, el disco está sujeto a procesos de redescubrimiento casi perpetuo, acogido por nuevas generaciones alrededor del mundo, como demuestra en la actualidad la diversidad de versiones realizadas por bandas tributo y artistas de variadas orientaciones musicales.
A esto se agrega, otros matices que magnifican aún más su leyenda, como una estadística realizada a mediados de la década del 90 del pasado siglo, donde se comprobaba que de cada 5 ingleses, uno poseía una copia del TDSOTM en sus hogares, o como otras de carácter exquisito que son un añadido a su polifacético mito, como aquella, al iniciar la reproducción del CD de manera paralela al film El Mago de Oz (1939) de Victor Fleming, se evidencia una exacta sincronía con las escenas de dicha película, ¿coincidencias?. Y no olvidemos los detalles no menos relevantes al estilo “beatle” que se aprecia en algunas ediciones del disco donde al finalizar el lado 2, claro está en la versión en vinil, se escucha una breve pista “escondida”, solo audible a un muy alto volumen.
Pues bien, más allá de estos elementos que le otorgan un bonus de magia, la pregunta es: ¿Qué hace que una obra como el TDSOTM traspase las fronteras e idiomas y suene con frescura en la actualidad?
Dicha interrogante parece difícil de responder, sin embargo, la connotación histórica en que fue desarrollada la obra es determinante para su consolidación, vale decir, la identificación de los individuos con la misma. Revisemos algunos eventos; iniciada la década del 70 la administración de Richard Nixon reprimía brutalmente a los estudiantes que se oponían a la intervención en Vietman dando la estocada final a los sueños hippies, por otra parte, en el mundo se consolidaba un mercado financiero especulativo que dio lugar más tarde a los denominados petrodólares, llenándose las billeteras de banqueros e inversionistas listos para empréstitos a consecuencia del alto precio del barril de petróleo y que de inmediato origino una elevación en la materia prima para la elaboración de discos de vinil, el petróleo.
En este contexto, la obra, hace una representación de las sociedades denominadas de primer mundo, aturdidas por la rutina, la locura, el consumismo, dinero y más dinero temas que martillean de manera rutilante todo el disco. No olvidemos, que este fue concebido como una cámara que fotografía “todas las presiones de la vida moderna que pueden llevarnos a la locura” (Gilmour).
UN RETRATO DEL DISCO
La placa se inicia con un tenebroso latido de corazón, el estruendo de una máquina registradora y una perene risa maniaca que da paso a SPEAK TO ME, solo es el intro para el sutil BREATHE AND THE AIR que parece susurrarnos al oído y dar lugar al siniestro toque de ON THE RUN escenificada en pantalla gigante para los shows en vivo con un paciente transportado en camilla que recorre los pasillos de un sanatorio a toda velocidad, donde un hombre con la mirada exorbitada y fija sale disparado. En el firmamento azul y un amarillo tenue aparecen sorpresivamente decenas de relojes para dar lugar a TIME con el inicio cacofónico perfectamente empalmados. Dando lugar, apoteósicamente a los tambores atronadores de Mason pasando a escuchar a un Gilmour y Wright encandilados. En un guiño se retorna a BREATHE y se prepara suficiente aroma para impregnarnos con la canción más seductora sobre la muerte, THE GREAT GIG IN THE SKY una composición de Rick Wrigth y soñar con la magistral interpretación de Clare Torry para someternos a ese coro casi al ad infinitum que tanto nos estremece. Dando la vuelta el disco de vinil al lado 2 ingresamos a apreciar, MONEY y un contundente Dick Parry en el saxo mientras se hace una transición y la bienvenida a US AND THEM (una joyita descartada del sound track de película Zabriski Point, de Miguel Angelo Antonini), otra estocada de Wright con la intervención nuevamente de Parry en el saxo esta vez inversa a la de Money, casi murmurada. Se da pie al optimista ANY COLOR YOU LIKE e ingresa ECLIPSE y parecen hacerse presentes todos los fantasmas de Roger, es el tema que más se acerca al título original del disco y el corolario con el latido de corazón del inicio y la frase ya clásica “No existe un lado oscuro de la luna, de hecho, toda esta oscura”
EPILOGO
Algunos consideraran que la época más brillante de PF fue la psicodélica (bajo el liderazgo de Syd Barret) o aquellos que piensen que el posterior Wish you we here denote superioridad, sin embargo, más allá de estas u otras consideraciones, es indudable que TDSOTM marcó un antes y un después en la historia de la música contemporánea (técnica y estéticamente) y que los elementos que la constituyen siguen siendo un canon indeleble en cada generación que lo re descubre. Ya hace más de dos décadas y una madrugada que lo escuche por primera vez y hasta el momento de concluir estas líneas me es difícil describir con exactitud qué es lo que me fascina de este disco, lo que sí puedo decir con total seguridad es que llego para quedarse para siempre en la mente, el alma y los sentidos de millones alrededor de este mundo que observa casi taciturno el Lado Oscuro de la Luna.

FUENTE: OTRO MELOMANO, Huáscar Adrián Cajías Cueto